América Latina enfrenta la encrucijada respecto de cómo dar el salto al desarrollo y mantener las tasas de crecimiento que le han permitido ingresar al grupo de países de ingreso medio. Es en este escenario donde surge un nuevo debate respecto del rol de los recursos naturales y la relación creciente con Asia y en especial con China.
En este contexto de boom de precios de los commodities, empujados –principalmente- por la demanda china, y la consecuente bonanza económica de los países latinoamericanos, se plantea la cuestión respecto a cuál trayectoria seguir. Dados los cambios en los patrones productivos y de consumo que evidencia el llamado “driver” de la economía mundial, China,se generan tópicos como la diversificación exportadora, el rol de la inversión extranjera directa y el antiguo desafío de la integración regional en América Latina.
En consecuencia, este libro apunta a alimentar el debate en torno a estos desafíos de futuro de las economías latinoamericanas, pero sobre la base de evidencia empírica que refuta algunos supuestos economicistas relacionados con la matriz productiva de la región; se sugiere un cambio drástico respecto a la visión prevaleciente en la región sobre el papel de los Recursos Naturales.